En Venezuela, la liberación de decenas de manifestantes detenidos tras las protestas poselectorales ha sido confirmada por las autoridades. Sin embargo, organizaciones de derechos humanos denuncian que cientos de ciudadanos permanecen tras las rejas, acusados de participar en manifestaciones contra el gobierno de Nicolás Maduro. Este gesto, que coincide con crecientes presiones internacionales, plantea interrogantes sobre las condiciones de detención y el estado de los derechos civiles en el país sudamericano.
Las elecciones, celebradas entre denuncias de irregularidades y cuestionamientos a su transparencia, llevaron a intensas protestas en varias regiones de Venezuela. Según activistas, muchos detenidos sufrieron torturas y tratos inhumanos, evidenciando el deterioro de los derechos humanos bajo el actual gobierno.
Tarek William Saab: 225 órdenes de libertad fueron "otorgadas y ejecutadas"
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció que se otorgaron y ejecutaron 225 órdenes de libertad para personas detenidas en el contexto de las manifestaciones. Aunque Saab calificó el hecho como una muestra del «compromiso del gobierno con la justicia».
Según el gobierno, en las protestas fueron detenidas unas 2.400 personas. Foro Penal ha logrado documentar plenamente poco más de 1.800 casos, de donde se deduce que al menos 1.600 personas continúan tras las rejas, cifra que algunas fuentes dicen que puede crecer hasta unas 3.000.
“Presos políticos” excarcelados sufrieron "daños irreparables" según María Corina Machado
La líder opositora María Corina Machado expresó que los detenidos liberados, muchos de ellos considerados presos políticos, enfrentaron «daños irreparables». Machado detalló casos de tortura, hambre y aislamiento prolongado. «Esto no borra el sufrimiento ni la injusticia. Seguimos exigiendo la libertad de todos los venezolanos encarcelados por razones políticas», enfatizó.
Muere testigo electoral Jesús Manuel Martínez Medina “Manolín” detenido el 29 de julio
La muerte de Jesús Manuel Martínez Medina, conocido como “Manolín”, testigo electoral detenido el pasado 29 de julio, generó conmoción. Según sus familiares, su fallecimiento estuvo relacionado con las condiciones precarias de detención y la falta de atención médica adecuada. Este caso subraya la vulnerabilidad de los detenidos en el sistema penitenciario venezolano.